
Tipos de placas solares
Existen tres tipos principales de placas solares: las placas solares de silicio monocristalino, las de silicio policristalino y las de película fina.
Placas solares de silicio monocristalino
Están hechas de células solares de silicio monocristalino, que se cortan de un solo cristal de silicio.
Son las más eficientes y duraderas, ya que tienen una mayor capacidad de conversión de la luz solar en energía eléctrica. Sin embargo, también son las más costosas.
Placas solares de silicio policristalino
Están hechas de células solares de silicio policristalino, que se cortan de bloques de silicio fundido.
Son menos eficientes que las de silicio monocristalino, pero también son más económicas.
Placas solares de película fina
Se fabrican mediante la deposición de una fina capa de material fotosensible (como el telururo de cadmio o el silicio amorfo) sobre una base de vidrio o metal.
Son las más delgadas y ligeras, y se pueden integrar en objetos cotidianos como ventanas, techos o fachadas. Sin embargo, son menos eficientes que las de silicio cristalino y tienen una vida útil más corta.
Otros tipos de placas solares
Además de estos tipos principales, también existen placas solares bifaciales, que tienen células solares en ambos lados, lo que les permite capturar más luz solar y aumentar la eficiencia en determinadas condiciones.
También hay placas solares flexibles y plegables, que se pueden adaptar a diversas formas y aplicaciones, como la carga de dispositivos móviles o la alimentación de equipos electrónicos en exteriores.
En general, la elección del tipo de placa solar dependerá de factores como la eficiencia, el costo, la durabilidad y la aplicación específica.